754

Al abrir el Santo Evangelio, piensa que lo que allí se narra —obras y dichos de Cristo— no sólo has de saberlo, sino que has de vivirlo. Todo, cada punto relatado, se ha recogido, detalle a detalle, para que lo encarnes en las circunstancias concretas de tu existencia.

—El Señor nos ha llamado a los católicos para que le sigamos de cerca y, en ese Texto Santo, encuentras la Vida de Jesús; pero, además, debes encontrar tu propia vida.

Aprenderás a preguntar tú también, como el Apóstol, lleno de amor: "Señor, ¿qué quieres que yo haga?…" —¡La Voluntad de Dios!, oyes en tu alma de modo terminante.

Pues, toma el Evangelio a diario, y léelo y vívelo como norma concreta. —Así han procedido los santos.

Referencias a la Sagrada Escritura
Este punto en otro idioma