238
Déjame que, como hasta ahora, te siga hablando en confidencia: me basta tener delante de mí un Crucifijo, para no atreverme a hablar de mis sufrimientos… Y no me importa añadir que he sufrido mucho, siempre con alegría.
Materias
Este punto en otro idioma
Documento imprimido desde https://escriva.org/es/surco/238/ (27/04/2024)