657 |
 |
La verdadera virtud no es triste y antipática, sino amablemente alegre.
|
658 |
 |
Si salen las cosas bien, alegrémonos, bendiciendo a Dios que pone el incremento. ¿Salen mal? Alegrémonos, bendiciendo a Dios que nos hace participar de su dulce Cruz.
|
659 |
 |
La alegría que debes tener no es esa que podríamos llamar fisiológica, de animal sano, sino otra sobrenatural, que procede de abandonar todo y abandonarte en los brazos amorosos de nuestro Padre-Dios.
|
660 |
 |
Nunca te desanimes si eres apóstol. No hay contradicción que no puedas superar. ¿Por qué estás triste?
|
661 |
 |
Caras largas..., modales bruscos..., facha ridícula..., aire antipático: ¿Así esperas animar a los demás a seguir a Cristo?
|
662 |
 |
¿No hay alegría? Piensa: hay un obstáculo entre Dios y yo. Casi siempre acertarás.
|
663 |
 |
Para poner remedio a tu tristeza me pides un consejo. Voy a darte una receta que viene de buena mano: del apóstol Santiago.
"Tristatur aliquis vestrum?" ¿Estás triste, hijo mío? "Oret!" ¡Haz oración! Prueba a ver.
|
664 |
 |
No estés triste. Ten una visión más... "nuestra" más cristiana de las cosas.
|
665 |
 |
Quiero que estés siempre contento, porque la alegría es parte integrante de tu camino. Pide esa misma alegría sobrenatural para todos.
|
666 |
 |
"Lætetur cor quærentium Dominum" Alégrese el corazón de los que buscan al Señor.
Luz, para que investigues en los motivos de tu tristeza.
|