704

Una visita al monasterio famoso. —Aquella señora extranjera sintió apiadársele las entrañas al considerar la pobreza del edificio: «¿Deben llevar ustedes una vida muy dura, no?» Y el monje, satisfecho, se limitó a contestar: «Tú lo quisiste, fraile mostén; tú lo quisiste, tú te lo ten».

Esto, que gozosamente oí decir a ese santo varón, tengo que decírtelo a ti con pena, cuando me cuentas que no eres feliz.

Este punto en otro idioma