Quomodo fiet istud quoniam virum non cognosco? ¿cómo podrá obrarse este prodigio, si no conozco varón? Pregunta de María al Angel, que es reflejo de su Corazón sincero.
Mirando a la Virgen Santa, me he confirmado en una norma clara: para tener paz y vivir en paz, hemos de ser muy sinceros con Dios, con quienes dirigen nuestra alma y con nosotros mismos.