Josemaría Escrivá Obras
729

¿Planificarlo todo? —¡Todo!, me has dicho. —De acuerdo; es necesario ejercitar la prudencia, pero ten en cuenta que las empresas humanas, arduas u ordinarias, conservan siempre un margen de imprevistos..., y que un cristiano, además, no debe cerrar el paso a la esperanza, ni prescindir de la Providencia divina.

Anterior Ver capítulo Siguiente