Josemaría Escrivá Obras
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“Dominus dabit benignitatem suam et terra nostra dabit fructum suum —el Señor dará su bendición, y nuestra tierra producirá su fruto.

    —Sí, esa bendición es el origen de todo buen fruto, el clima necesario para que en nuestro mundo podamos cultivar santos, hombres y mujeres de Dios.

    “Dominus dabit benignitatem —el Señor dará su bendición. —Pero, fíjate bien, a continuación señala que El espera nuestro fruto —el tuyo, el mío—, y no un fruto raquítico, desmedrado, porque no hayamos sabido entregarnos; lo espera abundante, porque nos colma de bendiciones.

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