293

“Es tiempo de esperanza, y vivo de este tesoro. No es una frase, Padre —me dices—, es una realidad”.

Entonces…, el mundo entero, todos los valores humanos que te atraen con una fuerza enorme —amistad, arte, ciencia, filosofía, teología, deporte, naturaleza, cultura, almas…—, todo eso deposítalo en la esperanza: en la esperanza de Cristo.

Este punto en otro idioma