Lista de puntos

Hay 8 puntos en «Surco» cuya materia es Apostolado → dificultades en el apostolado.

¿Que no tiene tiempo?… Mejor. Precisamente a Cristo le interesan los que no tienen tiempo.

No te sorprendas y no te amilanes porque te ha reprochado que le hayas puesto frente a frente con Cristo, ni porque te haya añadido, indignado: “ya no puedo vivir tranquilo sin tomar una decisión…”

Encomiéndale… Es inútil que trates de tranquilizarle: quizá se le ha puesto en primer plano una antigua inquietud, la voz de su conciencia.

¿Vacilas en lanzarte a hablar de Dios, de vida cristiana, de vocación…, porque no quieres hacer sufrir?… Olvidas que no eres tú quien llama, sino El: «ego scio quos elegerim» —yo sé bien a los que tengo escogidos.

Además, me disgustaría que, detrás de esos falsos respetos, se escondiera la comodidad

o la tibieza: ¿a estas alturas prefieres una pobre amistad humana a la amistad de Dios?

Has tenido una conversación con éste, con aquél, con el de más allá, porque te consume el celo por las almas.

Aquél cogió miedo; el otro consultó a un “prudente”, que le ha orientado mal… —Persevera: que ninguno pueda después excusarse afirmando «quia nemo nos conduxit» —nadie nos ha llamado.

No te asustes ni te asombres, ante la cerrazón de algunos. Nunca dejará de haber fatuos que esgriman, con alardes de cultura, el arma de su ignorancia.

¡Qué pena comprobar cómo marchan unidos, por distintas pasiones —pero unidos contra los cristianos, hijos de Dios—, los que odian al Señor y algunos que afirman que están a su servicio!

En ciertos ambientes, sobre todo en los de la esfera intelectual, se aprecia y se palpa como una consigna de sectas, servida a veces hasta por católicos, que —con cínica perseverancia— mantiene y propaga la calumnia, para echar sombras sobre la Iglesia, o sobre personas y entidades, contra toda verdad y toda lógica.

Reza a diario, con fe: «ut inimicos Sanctae Ecclesiae —enemigos, porque así se proclaman ellos— humiliare digneris, te rogamus audi nos!» Confunde, Señor, a los que te persiguen, con la claridad de tu luz, que estamos decididos a propagar.

¿Que es vieja esa idea del catolicismo, y por tanto inaceptable?… —Más antiguo es el sol, y no ha perdido su luz; más arcaica el agua, y aún quita la sed y refresca.

Referencias a la Sagrada Escritura