Lista de puntos

Hay 10 puntos en «Camino» cuya materia es Apóstol → caridad, convivencia .

Que el fuego de tu Amor no sea un fuego fatuo. —Ilusión, mentira de fuego, que ni prende en llamaradas lo que toca, ni da calor.

Tu caridad es... presuntuosa. —Desde lejos, atraes: tienes luz. —De cerca, repeles: te falta calor. —¡Qué lástima!

¿Sabes que aquella persona está en peligro para su alma? —Desde lejos, con tu vida de unión, puedes serle ayuda eficaz. —¡Hala, pues!, y no te intranquilices.

Dile, a... ese, que necesito cincuenta hombres que amen a Jesucristo sobre todas las cosas.

No cuentes hechos de «tu» apostolado como no sea para provecho del prójimo.

Tú, hijo predilecto de Dios, siente y vive la fraternidad, pero sin familiaridades.

Hacer cabeza en una obra de apostolado es tanto como estar dispuesto a sufrirlo todo, de todos, con infinita caridad.

En tu empresa de apostolado no temas a los enemigos de fuera, por grande que sea su poder. —Este es el enemigo imponente: tu falta de «filiación» y tu falta de «fraternidad».

Entiendo bien que te diviertan los desprecios que te hacen —aunque vengan de enemigos poderosos—, mientras sientas la unión con tu Dios y con tus hermanos de apostolado. —¿A ti, qué?

Con frecuencia comparo la labor de apostolado con una máquina: ruedas dentadas, émbolos, válvulas, tornillos...

Pues, la caridad —tu caridad— es el lubricante.